7.2. Comprobaciones de piezas y conjuntos desmontados
Las comprobaciones serán: visuales, mecánicas y eléctricas.
Comprobaciones del rotor • Visuales y mecánicas. Al verificar el rotor, se observará si las muñequillas del eje y los colectores de flujo se encuentran en buen estado. No tendrán señales de uso excesivo, ni rayas, grietas, golpes o signos de oxidación. La superficie de los anillos rozantes debe presentar buen aspecto y no tener rayas o grietas. Si la superficie de los anillos tuviera señales de chisporroteo y un pequeño desgaste, se puede repasar con un pliego de lija. Si el desgaste es excesivo o de aspecto rugoso, se procede a su mecanizado en el torno. • Eléctricas. Comprobación de aislamiento a masa. Esta comprobación la realizaremos utilizando una lámpara serie de 15 W a 230 V, o un comprobador de aislamiento. Colocando la lámpara serie según muestra la figura, comprobaremos el aislamiento a masa entre un anillo rozante y el eje. En caso de derivación, es preciso cambiar el rotor.
Comprobaciones del estator • Visuales y mecánicas. Comprobaremos el buen estado en general del conjunto formado por el cuerpo del estator y las bobinas inducidas. Los arrollamientos se deberán encontrar en buen estado, sin presentar deformaciones ni deterioros en el aislamiento. • Eléctricas. Comprobación del aislamiento a masa. Para esta comprobación se utiliza una lámpara serie de 15 W a 230 V o un comprobador de aislamiento. Comprobación de la resistencia del bobinado de una fase: la resistencia se mide entre una salida y el punto común de las tres fases (figura 8.40) de la conexión en estrella. La resistencia óhmica es muy pequeña, del orden de 0,18 a 0,5 Q.
Comprobaciones de los diodos
Los diodos independientes se comprueban de forma sencilla por medio de un multímetro con función propia para diodos o con función continuidad con señal acústica. Otra forma de comprobación es por medio de una punta de prueba (luminosa) y una fuente de alimentación de corriente continua (batería). Conectando el borne negativo de la fuente al soporte, con la punta de pruebas conectada al borne positivo, iremos haciendo contacto en los terminales aislados de los diodos y la lámpara deberá encenderse. En caso de diodos cátodo base, si permanece apagada, el diodo está en circuito abierto. Invirtiendo las conexiones, es decir, borne positivo al soporte y el borne negativo a la punta de pruebas, la lámpara debe permanecer apagada al conectar la punta de pruebas a los terminales de los diodos. En este caso, si la lámpara se enciende el diodo está en cortocircuito. En caso de funcionamiento incorrecto hay que cambiar el diodo, o bien el soporte completo si los diodos son indesmontables.
Comprobación de puente rectificador
La pieza fundamental del puente rectificador es el diodo. Actualmente se emplean dos tipos de diodos, diodos de silicio y diodos Zener. La característica de ambos diodos, si se polarizan directamente, es que permiten el paso de la corriente del ánodo al cátodo, por lo tanto, un diodo Zener se comporta como un diodo normal de silicio. Si se polarizan inversamente, al principio no pasa corriente del cátodo al ánodo hasta el valor VZ (tensión Zener). A partir del valor VZ , el diodo normal se destruye pero el diodo zener sigue funcionando con normalidad ya que su resistencia, en estas condiciones, disminuye drásticamente. Por lo tanto el diodo Zener es un diodo que estabiliza la tensión. En los automóviles se utiliza con tensiones de 4,7 a 24 voltios. En el grupo de regulación es uno de los componentes más importantes. Los puentes rectificadores incorporan seis. Para su comprobación, una vez desconectado de los devanados del estátor, utilizaremos una fuente de corriente continua y una punta de pruebas o un polímetro.
Verificación del puente hexadiodo
Comenzaremos comprobando los tres diodos inferiores, diodos ánodo base a masa. Conectaremos el borne positivo de la fuente a la conexión de masa, y el borne negativo de la lámpara de pruebas haremos contacto en cada una de las conexiones para los terminales del estátor, con lo que la lámpara deberá permanecer encendida. Los diodos permiten el paso de corriente positiva en este sentido. Invirtiendo las conexiones negativo a masa y positivo a conexiones del estator, la lámpara permanece apagada, los diodos no conducen. Para comprobar los tres diodos de la parte superior, procederemos a conectar el borne positivo de la fuente a las zonas de conexión para los terminales del estator y el borne negativo a la lámpara de pruebas. Con la lámpara de pruebas, hacer contacto en la conexión salida de corriente, con lo que la lámpara debe encenderse. Invertir las polaridades de las conexiones de la lámpara de pruebas con la fuente de alimentación y realizar las anteriores pruebas. En este caso, la lámpara debe permanecer apagada, de lo contrario significa que un diodo está en mal estado y se tiene que sustituir el puente completo.
Verificación del puente nanodiodo
Conectar el borne positivo de la fuente de alimentación a cada una de las conexiones para los terminales de las bobinas inducidas y la lámpara de pruebas al borne negativo. Con la lámpara de pruebas, hacer contacto en la salida común de los diodos auxiliares. La lámpara debe encenderse. La lámpara debe quedar apagada. Un comportamiento diferente del previsto indica defecto en algún diodo por lo que se tiene que sustituir el puente completo.
Comprobación de las tapas soporte y escobillas
Comprobar el estado y el engrase de los rodamientos (deben girar suavemente, sin saltos y sin juego axial. Los rodamientos del alternador alcanzan las 20.000 r.p.m. El rodamiento más empleado es el de una hilera de bolas, disponen de lubricación interna y se encuentran sellados por las dos caras, la falta de lubricación y la tensión excesiva de la correa provocan el gripaje del rodamiento. Se comprobará el aislamiento entre ambas escobillas y entre estas y masa. Se debe verificar además la continuidad entre los terminales y las escobillas.
7.4. Identificación del alternador
La capacidad de cada alternador está indicada en una «placa de identificación» metálica, fija o grabada en la carcasa (figura 8.55), la placa tiene dos identificaciones: • La primera es el número de pedido de 10 cifras (0124215001). • La segunda identificación es la identificación de las características (GCB2-14 V 35-65 A). • La identificación de los alternadores se divide en dos generaciones. • La primera generación hasta el año 1985 y la segunda desde el 1985 en adelante.
7.5. Mantenimiento periódico del alternador
El mantenimiento de los alternadores viene determinado por las condiciones de trabajo y el vehículo al que van destinados. Dependiendo de su utilización, los fabricantes realizan diferentes tipos de alternadores para su correcta adaptación a las exigencias de los vehículos que los incorporan
. En alternadores para vehículos turismo, con recorridos de hasta 200.000 km, no es necesario ningún tipo de mantenimiento, al coincidir este kilometraje con la revisión en profundidad del motor o la sustitución de este. Los rodamientos auto lubricados que incorpora este tipo de alternador tienen una vida útil suficiente.
En vehículos industriales tales como camiones o autobuses con recorridos hasta 300.000 km para su primera revisión a fondo, se realizará el siguiente mantenimiento cada 100.000 km: • Limpiar las superficies externas del alternador. • Asegurarse de que las ranuras de ventilación están despejadas y que el ventilador no tiene ningún álabe roto. • Comprobar el estado de las escobillas y anillos rozantes • Comprobar el buen estado de las conexiones. Deben de estar bien sujetas, realizar un contacto correcto y no presentar roturas en su aislamiento. • En alternador es con engrasadores y canales de engrase, rellenar estos e inyectar grasa a presión en el cojinete. Si los rodamientos son de tipo abierto, en grasar directamente estos. • Comprobar el correcto funcionamiento del alternador. Para recorridos de más de 300.000 km hasta su primera revisión a fondo, se requieren alternadores sin anillos rozantes, con rotor guía, que incorporen rodamientos de duración extremadamente larga. El desgaste de las escobillas es muy reducido debido a la pequeña corriente de excitación. Los reguladores electrónicos (que en la actualidad son los más utilizados) no precisan mantenimiento: en caso de deterioro se sustituyen totalmente.