Conexión a internet
Conexión con módem
Un módem sirve para conectar un solo ordenador a internet. Sin embargo, si ese ordenador está conectado por otra parte a una red y usando un tipo de programa especial llamado proxy, se puede hacer que el resto de ordenadores de la red accedan a internet a través de ese módem y la correspondiente conexión. A esto se le llama tener una conexión compartida. El único inconveniente es que el ordenador que tiene el módem conectado debe estar siempre encendido, conectado a internet y con el software proxy ejecutándose; si no lo está, los demás no pueden acceder a internet, aunque sí forman una red. El software proxy también permite restringir el acceso a internet al resto de ordenadores. Por ejemplo, se puede impedir el acceso a determinados servicios o determinadas páginas, o se puede hacer que algunos ordenadores puedan acceder y otros no.
Conexión con router
Un router ADSL es un dispositivo que integra en un solo aparato un módem ADSL y un switch o punto de acceso, según sea solo de cable o inalámbrico. A través de la parte de módem se conecta a internet usando una línea ADSL o ADSL2+. A través de la parte hub o punto de acceso, conecta todos los ordenadores en red y permite el acceso de todos ellos a internet. La diferencia fundamental con el esquema anterior es que ningún ordenador debe estar permanentemente encendido para que los demás puedan acceder a internet. Solo es necesario que esté encendido y conectado el router.
Estructura lógica de una red
El protocolo TCP/IP y la dirección IP
Para que los ordenadores de una red puedan intercambiar información, son necesarias, además de la conexión física usando un medio y el hardware necesario, unas reglas que determinan cómo se debe enviar y recibir la información. Estas reglas están implementadas en los ordenadores en forma de los llamados protocolos. Los protocolos suelen estar incorporados en el sistema operativo, y entre ambos se ocupan de las comunicaciones. Los protocolos reciben encargos de las aplicaciones de red y realizan las comunicaciones necesarias para hacer esos encargos. Otra de las funciones importantes de un protocolo es determinar cómo se identifica cada ordenador dentro de la red. Para que un ordenador de una red se pueda comunicar con otro, necesita saber cómo se llama ese otro. Esto supone que dentro de una red cada ordenador tiene que tener un nombre diferente.
El protocolo más utilizado en redes LAN se llama TCP/IP y es el mismo que se usa en internet. El sistema operativo Windows siempre lo tiene instalado. Los nombres de los ordenadores en una red que usa el protocolo TCP/IP se denominan direcciones IP. Las direcciones IP están formadas por 4 números entre 0 y 255, separados por puntos.
Sin embargo, para las redes locales solo valen un conjunto de direcciones llamadas direcciones privadas, que son las siguientes:
- Rango 1: de la 10.0.0.0 a la 10.255.255.255, sin incluir ninguna de las dos.
- Rango 2: de la 172.16.0.0 a la 172.32.255.255, sin incluir ninguna de las dos.
- Rango 3: de la 192.168.0.0 a la 192.168.255.255, sin incluir ninguna de las dos.
De las anteriores, solo las tres primeras son privadas. Las direcciones IP que no son privadas se denominan públicas, y son las que se usan para identificar cada conexión particular a internet.
A la dirección IP, le acompaña otro conjunto de números llamado máscara de subred, que depende del rango que se elija:
- Para el rango 1 es 255.0.0.0
- Para el rango 2 es 255.255.0.0
- Para el rango 3 es 255.255.255.0
Todos los ordenadores de una red deben tener direcciones de uno solo de los rangos, y cada ordenador debe tener una dirección distinta. La máscara de subred indica los números de la dirección IP que deben ser iguales en todos los ordenadores de la red: deben ser iguales aquellos que están en las posiciones que tienen un 255 en la máscara. Por tanto, en el rango 1 todas las direcciones IP tienen que tener igual el primer número, en el rango 2 todas las direcciones IP tienen que tener iguales los dos primeros números, y en el rango 3 todas las direcciones IP tienen que tener iguales los tres primeros números. Por contra, los números de la dirección IP que ocupan posiciones que tienen un 0 en la máscara deben ser distintos para cada ordenador de la red. Haciendo un símil, podemos decir que una red de ordenadores es una familia de hermanos, que todos tienen los mismos apellidos para que se les reconozca como familia, pero cada uno tiene distinto nombre para que puedan distinguirse entre ellos.
Ejemplo de asignación de direcciones IP
Supongamos que queremos poner direcciones IP a una red de 4 ordenadores.
- Primero debemos escoger el rango que vamos a utilizar, por ejemplo, el 2. Al escoger este rango, sabemos que las máscaras de subred son 255.255.0.0 y que todas las direcciones deben tener los mismos dos primeros números.
- A continuación, elegimos esos dos primeros números, que deben estar dentro de lo permitido en el rango 2. Por ejemplo, escogemos 172.26. Todas las direcciones empezarán por estos dos números.
- Como los dos primeros tienen que ser siempre los mismos, los que pueden cambiar son los dos últimos. Vamos escogiendo parejas distintas de números para los dos últimos.
Debemos observar que los dos primeros números son siempre los mismos. Por ejemplo, la dirección 172.16.1.10 no la podemos usar para esta red, porque los dos primeros números no son 172.26.