La capacidad física que conocemos como fuerza
permite a la persona crear una tensión muscular, con el fin de vencer una oposición o una sobrecarga (levantar objetos, empujar, lanzar, sostener, retorcer, etc.). Tipos de fuerza Fuerza máxima: tal como indica la palabra, es la tensión que debe realizar la musculatura para vencer una oposición máxima. En ella podemos observar la expresión más clara de la fuerza. Sería el caso de la halterofilia. Potencia o fuerza explosiva: con ella se supera una oposición pequeña, aplicando la máxima velocidad al movimiento. Dicha oposición debe ser muy ligera o incluso puede bastar con el peso de! propio cuerpo. Por ejemplo: salto de altura o de longitud, lanzamiento de la pelota en balonmano, etc. Fuerza-resistencia: se repiten una y otra vez trabajos de fuerza muscular durante bastante tiempo. De ahí que su denominación incluya la palabra «resistencia». Algunos ejemplos son el remo, el ciclismo, carreras de fondo, natación larga distancia… La fuerza y el mecanismo de contracción muscular Esta cualidad física está directamente relacionada con el aparato locomotor: huesos, músculos y articulaciones. Los músculos, gracias a su capacidad fisiológica de crear tensión pueden acortar su longitud, movilizando así los huesos donde se insertan. A este fenómeno de acortamiento del músculo se le llama contracción muscular Pero la función de los músculos del cuerpo humano no es sólo contraerse. En muchas ocasiones crea un estado de tensión constante que permite mantener erecto el esqueleto o cualquier otra postura (de pie, sentados, etc.). A este estado de tensión constante del músculo se le llama tono muscular. El tono muscular es involuntario (es un acto reflejo) y siempre debe vencer la oposición que le presenta la fuerza de la gravedad
Estructura del músculo El músculo está formado, en primer lugar por fascículos musculares. En una imagen microscópica podríamos apreciar que éstos contienen numerosas fibras musculares. Cada una de esas fibras musculares es una célula y consta, a su vez, de diminutas «unidades especializadas» llamadas miofibrillas. Las miofibrillas son características porque poseen unas bandas transversales que les dan un aspecto estriado. Por ello llamamos músculos estriados a los que se encargan del movimiento. Cuando a las fibras musculares les llega un impulso nervioso son capaces de transformar la energía química (proporcionada por los diferentes nutrientes) en energía mecánica (provocando el movimiento): por un proceso químico las miofibrillas disminuyen su longitud acortando las fibras musculares, que a su vez, acortan todo el músculo. De esta capacidad que tienen los músculos para acortarse depende la fuerza muscular
Tipos de contracción muscular Isométrica: el músculo no cambia de longitud. Isotónica concéntrica: el músculo se contrae y se acorta. Isotónica excéntrica: el músculo se contrae pero se alarga. ¿Cómo entrenar la fuerza muscular? La fuerza muscular es una cualidad física que puede mejorarse fácilmente con el entrenamiento. El sistema de entrenamiento más utilizado para la mejora de la fuerza muscular es el sistema fraccionado (sistema de repeticiones). Sistema fraccionado Se trata de un ejercicio de fuerza muscular con movimientos iguales o repeticiones. Las repeticiones se agrupan en series. Entre cada serie existe un espacio de tiempo para dejar descansar el músculo, llamado pausa de recuperación. Para desarrollar la fuerza máxima. La contracción muscular debe ser máxima. Por tanto habrá de practicarse con ejercicios donde: • Peso o sobrecarga: debe ser la máxima posible (100%) o cercana a la máxima (90%). • Número de repeticiones en cada serie: se pueden realizar muy pocas debido a la gran fuerza que se debe aplicar, de 1 a 5. • Número de series: de 2 a 4. • Pausa de recuperación: 5 minutos. Por ejemplo: ejercicio de «sentadilla» para la musculatura de las extremidades inferiores. Primera serie: (1 x 100%) Segunda serie: (2 x 95%) Tercera serie: {3 x 90%) Para desarrollar la potencia o fuerza explosiva. La contracción muscular debe ser realizada a máxima velocidad y con poco peso. Fuerza y velocidad se unen para conseguir un movimiento explosivo. Éstas son sus pautas de trabajo: • Peso o sobrecarga: a) Con el propio peso del cuerpo. Se utilizan numerosos ejercicios gimnásticos, así como multisaltos, impulsos, etc. b) Con ligeras sobrecargas. Se utilizan chalecos lastrados, cinturones lastrados, gomas elásticas, balones medicinales, etc. En los entrenamientos de algunas especialidades deportivas, se utiliza el mismo utensilio de competición (el peso, una jabalina, una pelota de balonmano, etc.) pero ligeramente más pesado. • Número de repeticiones por cada serie: 6 a 10. • Número de series: 4 a 6. • Pausa de recuperación: 3 minutos.
Fuerza y edad De forma natural, a partir de los 8 años mejora la fuerza muscular. Pero es a partir de los 12 años cuando esta cualidad física se va a desarrollar con mayor rapidez. Coincide con una etapa llamada pubertad, que va desde los 12-14 años hasta los 18, y cuando el hombre y la mujer incrementan sus caracteres sexuales.La fuerza llega a su máximo nivel hacia los 25 años, pero con un entrenamiento adecuado 5 puede mantenerse hasta los 35 años.En el caso de las personas sedentarias, que no trabajan la fuerza muscular, se produce un fenómeno contrario a la hipertrofia, que se llama atrofia muscular, o descenso del volumen muscular y la pérdida progresiva y rápida de fuerza.En cuanto a la diferencia de sexos, la mujer tiene unos valores ligeramente inferiores, ya que el varón tiene, en general, más masa muscular.