No dejar basura o desechos para que los recoja el que viene detrás.
Despejar las pasarelas, plataformas de trabajo y escaleras, retirando de ellas los materiales y equipos que no sean de uso inmediato.
Limpiar líquidos derramados.
Depositar desechos en los sitios acondicionados a tal fin.
Sacar o aplastar los clavos que vea sobresalir de tablas de madera.
Causas de accidentes
Trabajadores atrapados y enterrados en una excavación debido al derrumbe de los costados.
Trabajadores golpeados y lesionados por materiales que caen dentro de la excavación.
Trabajadores que caen dentro de la excavación.
Medios de acceso inseguros y medios de escape insuficientes en caso de anegamiento.
Vehículos llevados al borde de la excavación o muy cerca del mismo (sobre todo en marcha atrás), que causan desprendimiento de paredes.
Asfixia o intoxicación causadas por gases más pesados que el aire que penetran en la excavación, por ejemplo, los gases de los tubos de escape de motores diésel y de gasolina.
Contacto eléctrico con redes subterráneas.
Medidas de seguridad para impedir el derrumbamiento de las excavaciones y las caídas
Debe darse a los lados de la excavación o zanja una inclinación segura, generalmente con un ángulo de 45 grados en reposo.
Apuntalarlos con madera u otro material adecuado para impedir que se derrumben.
La clase de soporte dependerá del tipo de excavación, la índole del terreno y el agua subterránea existente.
La planificación es de vital importancia.
Es preciso asegurar la disponibilidad de materiales para apuntar la zanja que ha de cavarse y para toda su extensión.
Los soportes deben instalarse sin demora al practicar la excavación.
Si el suelo es inestable o carece de cohesión, se necesita un entablado más apretado.
Nunca se debe trabajar por delante de la zona apuntalada.
Los apuntalamientos deben ser instalados, modificados o desmantelados solo por obreros especializados bajo supervisión.
Se deben colocar antes de haber cavado hasta la profundidad máxima de la zanja.
La excavación e instalación de soportes deberá continuar entonces por etapas, hasta llegar a la profundidad deseada.
Inspección
Las excavaciones deben ser inspeccionadas por una persona idónea antes de que comience el trabajo en ellas.
Por lo menos una vez por día luego de iniciadas las tareas.
Una persona idónea las debe revisar a fondo una vez por semana, y se debe llevar un registro de esas inspecciones.
Orillas
No se deben almacenar ni mover materiales o equipos cerca de las orillas de las excavaciones.
Lo anterior produce el peligro de que caigan materiales sobre los que trabajan abajo.
O que aumente la carga en el terreno circundante y se rompan las estibaciones o los soportes de sostén.
Las acumulaciones de desechos o suelo sobrante deben también estar alejadas de las orillas de las zanjas.
Vehículos
Deban colocarse bloques de tope adecuados y bien anclados en la superficie para impedir que los camiones tolva se deslicen dentro de las excavaciones.
Riesgo que corren en especial cuando dan marcha atrás para descargar.
Los bloques deben estar a suficiente distancia de la orilla para evitar los peligros de un desprendimiento bajo el peso de los vehículos.
Conductos de servicios enterrados o subterráneos
Antes de empezar a cavar, ya sea a mano o con una excavadora, recuerde que puede haber conductos de servicio bajo la superficie.
En las zonas urbanizadas siempre hay que esperar la presencia de cables eléctricos, ductos de agua potable y alcantarillado.
En algunos sitios también puede haber cañerías de gas.
Algunos de estos servicios tienen aspectos similares, de modo que al encontrarlos siempre hay que suponer lo peor. Dar contra un cable eléctrico puede causar la muerte o lesiones severas por choque eléctrico o quemaduras graves.
Una cañería de gas rota tiene pérdidas y puede provocar explosiones.
Los ductos de agua potable o alcantarillados pueden acarrear riesgos súbitos, anegando la excavación o causando el derrumbamiento de sus paredes.
Otros servicios
Como en el caso de suministro de electricidad, deben hacerse averiguaciones con las autoridades que correspondan y con el dueño de la propiedad acerca de la existencia de planos de cañerías de gas y agua corriente, alcantarillados y cables telefónicos, y luego utilizar métodos de trabajo similares.
No deben usarse excavadoras mecánicas a menos de medio metro de distancia de un caño de gas. Si se siente olor a gas, asegúrese de que no haya focos de combustión cercanos, como cigarrillos encendidos o motores en marcha. Manténgase alejado de la zona, no permita el acceso de otras personas y llame a la compañía de gas. No deben usarse equipos o instalaciones pesadas encima o cerca de los caños de gas, para prevenir su rotura.
Los cables y ductos que hayan quedado expuestos al abrir una zanja deben ser sostenidos con soportes. No se los debe usar nunca para apoyar equipos o como escalones para bajar y subir de la excavación. Al rellenar una zanja en la que hay caños de gas, asegúrese de que el relleno esté bien afirmado debajo de ellos para evitar roturas o rajaduras cuando se asienten.