Historia de la Natación
Desde la prehistoria, el ser humano ha intentado dominar el medio acuático como una forma de supervivencia y búsqueda de alimentos. Los egipcios, cuyo país estaba cortado por innumerables canales, consideraban el arte de nadar como un aspecto esencial de la educación pública. Los japoneses celebraban competencias deportivas, incluyendo la natación (38 a.C.). Los fenicios, grandes navegantes y comerciantes, tenían grupos de nadadores entrenados para sortear dificultades como la acumulación de arena y piedras, e incluso para transportar mercancías y pasajeros en caso de naufragio.
En la antigua Grecia y Roma, la natación era practicada por la aristocracia y los hombres libres. Se consideraba analfabeto o inculto a quien no sabía nadar ni escribir. Los helenos fueron los primeros en relacionar las ventajas físicas e intelectuales de la natación. En la sociedad feudal, formaba parte de las «siete agilidades» de los caballeros. Durante el Humanismo y la Ilustración, se prestó más atención a los ejercicios físicos, y a finales del siglo XV apareció el primer manual de natación.
El Agua: Un Elemento Diferente
Al sumergir la cara en el agua, experimentamos sensaciones distintas a las habituales. Sentimos una suave presión a la que no estamos acostumbrados, provocada por el líquido. La temperatura suele ser diferente, lo que intensifica las sensaciones. Además, no podemos utilizar los mecanismos de respiración habituales para el intercambio de oxígeno y dióxido de carbono.
La presión del agua dificulta la apertura de los ojos, y la visión se vuelve borrosa. Las dimensiones, distancias y referencias cambian, especialmente si el agua está en movimiento. Al sumergir la cabeza hasta tapar los oídos, también percibimos diferencias: los sonidos son más agudos y las ondas sonoras se propagan más rápidamente debido a la mayor densidad del agua.
Al movernos dentro del agua, necesitamos más fuerza de lo normal y debemos mantener el equilibrio.
Flotación: Diferencias entre Hombres y Mujeres
Según el principio de Arquímedes, todo cuerpo sumergido en un líquido recibe un empuje de abajo hacia arriba igual al peso del volumen del líquido desalojado. La flotación es el resultado de esta fuerza elevadora.
Las mujeres tienden a flotar más que los hombres debido a:
- Mayor tejido adiposo y distribución más homogénea.
- Músculos más blandos.
- Mayor diámetro de cadera en relación con los hombros, lo que aumenta el volumen en la cadera.
¿Qué es Nadar?
Nadar es la habilidad que permite al ser humano desplazarse en el agua gracias a la acción propulsora de movimientos rítmicos, repetitivos y coordinados de los miembros superiores, inferiores y el cuerpo. Esto permite mantenerse en la superficie o desplazarse subacuáticamente, venciendo la resistencia del agua.
¿De qué depende la capacidad de nadar?
- Grado de flotación.
- Resistencia del agua.
- Eficacia de la propulsión.
- Capacidades físicas y orgánicas del individuo.
Natación Infantil
Es el primer acercamiento del niño al aprendizaje de la natación. Es un momento único en el que se deben proporcionar condiciones para que se sienta feliz, cómodo y seguro.
Familiarización con el Medio Acuático
- No traumática: Respetar los tiempos y características individuales de cada alumno.
- Progresiva: Seguir los pasos metodológicos de cada contenido.
- Positiva: Conocer el nuevo medio, sus características y cómo se comporta el cuerpo en él.
Ambientación al Medio Acuático
Es un proceso sistemático que, a través de la intervención pedagógica intencional sobre la conducta motora del alumno, busca una gradual y paulatina acomodación y asimilación del medio acuático.
Etapas de la ambientación
- Contacto.
- Desplazamiento.
- Inmersión y respiración.
- Flotación.
- Dominio del cuerpo (propulsión).
Técnica de Crol
Es una técnica simétrica y alternada. Para analizarla, se divide en:
1. Posición del Cuerpo
Alineación Horizontal
- La línea del agua debe estar entre el nacimiento del pelo y la mitad de la frente.
- La vista se dirige hacia abajo y adelante.
- La espalda debe estar recta.
- No sobredimensionar la amplitud del batido de piernas.
Alineación Lateral
Mantener una buena alineación corporal, rotando el cuerpo de lado a lado con el movimiento de brazos y piernas. Cuando el cuerpo rota a la derecha, la pierna de ese lado realiza un batido diagonal descendente, mientras que la otra va hacia arriba y a la izquierda. Esto se invierte al rotar el cuerpo a la izquierda.
Rolido (Giro del Cuerpo)
Giro sobre el eje longitudinal hacia ambos lados, entre 30° y 45° aproximadamente por ciclo completo de brazos. El movimiento se acentúa hacia el lado que se respira (entre 5° y 10° más).
2. Movimiento de Brazos
Entrada al Agua y Agarre
La entrada se realiza directamente por delante del hombro, entre la línea media del cuerpo y el hombro. El codo debe estar ligeramente flexionado y elevado. La palma de la mano entra rotada hacia afuera, con la punta de los dedos (o el pulgar) tocando primero el agua. Luego, el antebrazo (alineado con la mano, sin flexionar la muñeca) entra en contacto. El brazo se extiende hacia adelante y busca profundidad, por debajo de la superficie, con la palma hacia abajo.
El agarre ocurre cuando la mano se desliza ligeramente hacia afuera de la línea imaginaria del hombro, girando la palma hacia afuera y atrás para una posición favorable en la fase de tracción.
Tracción
El brazo se mueve hacia adentro describiendo un semicírculo. La mano continúa hacia adentro y atrás mientras el codo se flexiona progresivamente, alcanzando un ángulo de 90° a 110° (dependiendo de la fuerza y el rolido). El codo se mantiene elevado hasta que el antebrazo está debajo del cuerpo. La palma, inicialmente orientada hacia atrás, se orienta ligeramente hacia arriba al final, y el codo apunta hacia el lateral de la piscina.
Empuje
La inclinación cambia de adentro hacia afuera. La mano gira rápidamente mientras el brazo se extiende hacia afuera, arriba y atrás, hacia la superficie. La palma sigue la misma dirección. El brazo termina extendido con la palma hacia arriba cuando la mano llega a la altura del muslo (no a la superficie), para salir ligeramente flexionado y evitar turbulencias.
Recobro (Recuperación)
Debe ser lo más relajado posible, aprovechando la movilidad articular y el rolido. Los nadadores deben rolar hacia el lado del brazo que se está recobrando, elevando el hombro para una posición de codo alto y una dirección de movimiento lineal. El recobro comienza antes de que la mano salga del agua al final del empuje. El brazo se flexiona al principio del movimiento y se extiende progresivamente hacia adelante, en línea con el hombro. La mano y el codo deben estar en la misma línea perpendicular al hombro. La entrada se realiza con el brazo ligeramente flexionado y la palma girada diagonalmente.
3. Movimiento de Piernas
Aunque contribuyen poco a la propulsión, son vitales para la técnica global. Los movimientos laterales equilibran el cuerpo, ayudan a la rotación y mantienen la alineación.
Fase Descendente
Tiene lugar durante el batido ascendente de la otra pierna. Comienza antes de que la pierna alcance su punto más alto. Cuando la pierna pasa la altura del cuerpo, el muslo desciende por la flexión de la cadera, mientras que la parte inferior de la pierna permanece arriba. Luego, la parte inferior de la pierna se extiende enérgicamente hacia abajo y atrás, como un latigazo.
Fase Ascendente
Comienza cuando la pierna está extendida a la altura de la rodilla y se desplaza hacia arriba por la acción del glúteo mayor y la extensión de la cadera. La pierna se mantiene relajada; es un movimiento de recuperación. El movimiento propulsivo ocurre en la fase descendente. El batido ascendente finaliza cuando la pierna sobrepasa la línea del cuerpo o los talones están cerca de la superficie.